Sintomatología Pelos parados, lengua gruesa Descarga eléctrica: nueve voltios Parestesia emocional, nuca sudorosa Diluvio cervical: veintiún amperios Escalofríos de oxitocina, dedos crispados Resistencia a sentir: veintisiete ohmios Palabras convulsas, espalda chorreante Capacidad de destrucción: ciento ocho faradios Uñas azules y espuma en la boca Relámpago cardiaco: setecientos cincuenta y seis voltios Electromágnético, positivo.
Symptomatology Goosebumped hairs, thick tongue Electric download, nine volts Emotional paresthesia, sweating nape Cervical flood: twenty-one amps Oxytocin chills, contracted fingers Resistance to feel: twenty-seven ohms Convulsive words: oozing back Destruction capacity: a hundred and eighty farads Blue nails and frothing mouth Cardiac lightning: seven hundred and fifty-six volts Electromagnetic, positive.
Mientras tomaba el taller de Los Impresentables en el 2022, también tomé otro taller más corto llamado Miradas Distintas en el Instituto Caro y Cuervo. En este taller leímos a poetas colombianas contemporáneas como Maria Paz Guerrero, Fátima Vélez, Tania Ganitski, Eliana Hernandez. En ese momento no las conocía y me alegró mucho poder conocerles su pluma junto a otras personas con el mismo interés: explorar miradas distintas en la escritura.
Sintomatología es un texto resultado de uno de los ejercicios de escritura del taller Miradas distintas en cuanto a forma; y en cuanto a contenido, de un ejercicio de los Impresentables: escribir un texto sobre algo cotidiano que yo hubiese dado por hecho en mi día a día. Así que se me ocurrió que podía escribir sobre la electricidad. Al investigarla, resulté estudiando física: cómo se produce, en dónde está presente la electricidad y cuando me tropecé con la electricidad en el cuerpo humano, caí en una madriguera de conejo. Investigué lo que le sucede al cuerpo cuando se electrocuta, la electricidad que produce el cuerpo humano por sí mismo. La lista de vocabulario para nombrar estos fenómenos era extensa y la desconocía, así que hice un glosario para mí. Cuando sentí que tenía suficientes palabras de esos campos semánticos, empecé a jugar, a hacer frases, no se me ocurría nada en específico. Entre tanto combinar palabras para hacer frases, fue cuajando una sensación, la vi saliendo y la seguí sacando con más frases hasta que resultó una primera versión. Este texto lo reescribí siete veces. Mis compañeros de los talleres escucharon con paciencia la mayoría de las versiones. Esta vez, no edité la séptima versión que escribí en el 2022, solo la traduje al inglés. Así que esa es la última versión de Sintomatología.
Me encantaría saber si este poema les dice algo…Pueden dejar sus comentarios debajo de esta publicación en la aplicación de Substack o simplemente respondiendo a este mensaje desde sus correos electrónicos. Como siempre, muchas gracias por acompañarme en mi proceso de escritura: sin su lectura, Pluma Afilada queda a mitad de camino.
While I was doing Los Impresentables creative writing workshop in 2022, I also did another workshop called Miradas Distintas at the Instituto Caro y Cuervo. In the latter, we read contemporary Colombian poets like Maria Paz Guerrero, Fátima Vélez, Tania Ganitski, and Eliana Hernandez. At that point, I didn’t know them and I was glad I did with other people with the same interest: explore a look at different views in writing.
Symptomatology resulted from one of the writing prompts from the Workshop Miradas Distintas in terms of form; regarding content, from another writing prompt from los Impresentables: write about everyday things I usually take for granted. It occurred to me I could talk about electricity. I ended up studying physics: how electricity is produced and where it is. When I stumbled upon the intersection of electricity and the human body, I fell into a rabbit hole. I researched what happens to the human body when it gets electrocuted and the electricity the human body produces on its own. The list of vocabulary to name these phenomena was extensive and I didn’t know it, so I made a glossary for myself. When I felt I had enough words from those semantic fields to make phrases, I started to play, to put words together but nothing specific came to mind. After playing with phrases like a puzzle for a while, a sensation started to crystallize. I saw it emerging, and I just carried on pulling it out until the first version came out. This text was rewritten seven times. My classmates from the creative writing workshops listened patiently to most of those versions. In this installment for Pluma Afilada, I didn’t edit the seventh version I finished in 2022. I just translated it into English. And that’s the last version of Symptomatology.
I’d love to know if this poem tells you anything … Feel free to leave a comment below this post on the Substack app or just hit reply to this message from your email, and it will land right in my inbox. As always, thank you for walking by my side in my writing process: without your reading, Pluma Afilada is left halfway.
Me recordó al libro de Rosa Montero (El peligro de estar cuerda) donde habla del uso de electrochoques en escritorxs. También sobre la creatividad y sobre este impulso casi maniático que incita a escribir. Te lo recomiendo mucho 😊